Actualmente las universidades públicas realizan más de 2000 proyectos de investigación por año y generan cerca del 65% por ciento del conocimiento de las investigaciones que se realizan en el país.
En la mesa redonda participaron representantes de tres de las cinco universidades públicas adscritas al Consejo Nacional de Rectores.
Desde hace más de una década estas instituciones realizan esfuerzos y han hecho propuestas orientadas a que este conocimiento esté disponible para toda la sociedad bajo la premisa de que es esta es la que financia la educación superior pública y los resultados que esta derivan.
Sin embargo para seguir avanzando en esa dirección los especialistas coinciden en la necesidad de algún tipo de regulación, legislación o política nacional por parte del Estado sobre acceso abierto que permita democratizar aún más el conocimiento.
En el marco de la Semana Internacional del Acceso Abierto, el pasado 24 de octubre del 2017 representantes de las universidades públicas adscritas al Consejo Nacional de Rectores (CONARE), se reunieron en la Universidad de Costa Rica para analizar la viabilidad de construir una política nacional sobre acceso abierto.
El encuentro fue organizado por la Escuela de Bibliotecología y Ciencia de la Información (EBCI), con el apoyo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).
Participaron en la actividad el Bach. Jorge Polanco Cortés de la Universidad de Costa Rica, el MSc. David Argüello Arce y la M.Sc. Andrea Mora Campos de la Universidad Nacional, Mag. Alexa María Ramírez Vega, del Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR) y la M.Sc. Saray Córdoba González, catedrática de la Universidad de Costa Rica, como moderadora.
Según manifestó la M.Sc. Córdoba, quien tiene una amplia experiencia en la materia, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha dado un gran impulso a las políticas de acceso abierto desde el 2013 basada en acuerdos internacionales.
Según la UNESCO, con el acceso abierto los académicos (as), profesores (as), estudiantes e investigadores (as) ganan acceso al conocimiento, las publicaciones ganan visibilidad y mayor uso, y se aumenta el impacto potencial de los resultados de investigación.
Para ello deben existir políticas nacionales e institucionales que logren aumentar el acceso y compartir el conocimiento, lo cual hace que se acelere el desarrollo científico, promueva la colaboración global y se estimule la innovación. Todo ello impacta en el desarrollo nacional y en la multiculturalidad.
La M.Sc. Córdoba hizo un repaso de los avances logrados por otros países en América Latina, como México, Perú y Argentina, que ya cuentan con leyes sobre acceso abierto, así como varios países europeos que tienen políticas o iniciativas en este campo, como es el caso de Italia, Francia y Alemania.
También se refirió a varias instituciones universitarias en diferentes países como Bélgica, Kenia, Reino Unido y Estados Unidos de América, que cuentan con políticas que facilitan el acceso a la información.
“Estas políticas universitarias han ido brotando para fortalecer la vía verde del acceso abierto, esto es, los repositorios, tendiendo a que recojan la producción científica que de ellas deriva”, agregó la especialista.
Sin embargo, la dijo que en los últimos años algunas empresas que comercian con esta información han tratado de desvirtuar estas políticas.
Detalló que en Costa Rica, a pesar de que existe legislación en la que se establece financiamiento a personas físicas o jurídicas para que realicen investigación con fondos públicos, no hay una directriz en materia de acceso abierto.
De acuerdo con Córdoba, los proyectos de investigación financiados con estos fondos generan artículos, tesis, recursos educativos y otras obras, que deben estar al servicio de la comunidad académica nacional, pero no es así.
“Las tesis que se financian con el Fondo de Incentivos (MICITT) y se defienden en el exterior, son prácticamente inaccesibles. Solo con una política de acceso abierto esto puede ser posible, como ya lo han hecho otros países”, añadió Córdoba.
El Bach. Jorge Polanco Cortés, representante la UCR, expuso los avances logrados en la Institución en materia de acceso abierto.
Las universidades públicas costarricenses han hecho importantes avances y constituye un modelo en materia de acceso abierto.
Los representantes de las instituciones universitarias públicas expusieron las acciones realizadas en las últimas décadas para fortalecer el acceso abierto al conocimiento.
En el caso de la UCR el Bach. Polanco destacó la adopción de licencias de acceso abierto como herramientas estándar para compartir la producción científica y académica, la creación del repositorio Kérwá y el Portal de Revistas de la UCR, así como cambios normativos y políticas aprobadas por el Consejo Universitario y el apoyo a la creación del repositorio nacional Kímuk.
El M.Sc. David Argüello Arce, de la UNA, avaló la posición del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) cuando afirma que “la producción académica de nuestras universidades no puede estar subordinada a los intereses o vaivenes del mercado editorial. Son nuestras sociedades las que pagan el trabajo que realizan nuestros académicos en América Latina, no las empresas del sector privado..”
Argüello explicó que la Universidad Nacional cuenta con políticas de conservación del patrimonio académico institucional que promueven el acceso abierto del conocimiento. Además, la producción editorial y los trabajos finales de graduación ahora están disponibles para todos y todas.
En el 2011 la UNA lanzó el Portal de Revistas Electrónicas y un repositorio institucional. Además ha promovido las licencias 4.0 y ha desarrollado programas de sensibilización en temas de propiedad intelectual y acceso abierto.
Por su parte, la Mag. Alexa María Ramírez Vega del Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR) dijo que las acciones en la Institución han sido desarrolladas principalmente por la Editorial del ITCR, la Biblioteca y la Vicerrectoría de Investigación.
Se logró un mejoramiento de las revistas académicas por medio de la creación del Portal de Revistas Institucionales a partir del 2012. Asimismo, se capacitó a todos (as) los editores (as) en el uso de esta herramienta y en el tema de acceso abierto.
También se promovió el ingreso a índices y bases de datos internacionales, se incorporaron contenidos en inglés, se creó un espacio para publicar memorias de congresos, simposios y actividades del ITCR y se creó un repositorio institucional.
En esta Institución se definieron políticas institucionales para el repositorio y el año pasado se lanzó una campaña sobre acceso abierto para concientizar a la comunidad universitaria.
La M.Sc. Andrea Mora Campos, también de la UNA, dijo que las cinco universidades han hecho un gran esfuerzo por trabajar juntas y de manera solidaria en este tema. Fue gracias a esa colaboración que se logró la creación del repositorio nacional Kímuk, el cual se nutre con información de los repositorios universitarios constituidos hasta ahora, y ya está integrado a otros repositorios latinoamericanos y mundiales.
En esta ocasión no participaron en la mesa redonda representantes de la Universidad Técnica Nacional (UTN) ni de la Universidad Estatal a Distancia (UNED). Tampoco hubo representantes del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT).
Luego de las presentaciones de los representantes de las universidades, los expositores (as) participaron en un diálogo abierto con el público en el que se analizaron algunos de los temas abordados en el foro y se propusieron acciones e iniciativas para construir una política nacional sobre acceso abierto.
Algunos de los temas discutidos fueron si se les debe pagar a los autores por las publicaciones, si deben entregarse las revistas para que otros se encarguen de editarlas a cambio de hacer negocio con ellas, si las instituciones universitarias deben seguir comprando paquetes de publicaciones a un alto costo y si los datos de investigación deben incluirse en las políticas sobre acceso abierto.
Todos (as) los representantes de las universidades se manifestaron claramente a favor de que la información esté disponible al menor costo posible para todas las personas que la necesiten.
Sin embargo, hasta ahora la falta de una política nacional sobre acceso abierto o alguna legislación que regule este tema, provoca que muchos materiales y documentos permanezcan fuera del alcance de los y las costarricenses.
Los presentes coincidieron en que el MICITT y otras entidades estatales deben asumir un mayor liderazgo para en conjunto con las universidades para crear alguna directriz o política en materia de acceso abierto.
Actualizado el viernes 3 de noviembre del 2017 a las 4:30 p.m. por César A. Parral
La actividad en el marco de la Semana Internacional del Acceso Abierto, el pasado 24 de octubre del 2017, en el auditorio de la Facultad de Educación.