Ciencia en el mundo

Disminución de esperanza de vida por COVID-19 alcanzó niveles de la II Guerra Mundial

Madri+d
Rev. Manrique Vindas Segura
César A. Parral
28. 09. 21

Un estudio del Centro Leverhulme de Ciencias Demográficas de Oxford afirma que en países como España,  el nivel de reducción de la esperanza de vida fue de 1,5 años.

La investigación analizó datos de 29 países, incluyendo Estados Unidos de América, Chile y la mayor parte de Europa, todos con «sistemas de registro de defunciones de alta calidad», y descubrió que 27 de ellos experimentaron reducciones en la esperanza de vida.

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Los hombres de diez países y las mujeres de 15, entre ellos España, tenían una esperanza de vida al nacer más baja en el 2020 que en el 2015, un año en el que este dato ya se había visto afectado negativamente por una temporada de gripe fuerte.

Esta es una de las conclusiones de un estudio del Oxford’s Leverhulme Centre for Demographic Science (Centro Leverhulme de Ciencias Demográficas), publicado este lunes en el 'International Journal of Epidemiology', según el cual la pandemia de COVID-19 provocó una pérdida de esperanza de vida en Europa Occidental no vista desde la década de 1940, y superó la observada en torno a la desintegración de la Unión Soviética en Europa del Este.

La esperanza de vida se refiere a la edad promedio que alcanzará un grupo de recién nacidos si las tasas de mortalidad actuales continúan durante toda su vida. Según el doctor José Manuel Aburto, coautor del estudio, en países de Europa occidental como España, Inglaterra, Italia, Francia o Bélgica, entre otros, «la última vez que se observaron disminuciones tan grandes en la esperanza de vida al nacer en un solo año fue durante la Segunda Guerra Mundial».

En España, en concreto, la esperanza de vida se ha acortado un promedio de 1,5 años. En el caso de los hombres españoles, la esperanza de vida al nacer en el 2019 era de 81,05 años, y en el 2020 de 79,61. En el caso de las mujeres, en el 2019 era de 86,5 años y en el 2020 de 85.

Para este estudio, el equipo de investigación analizó los datos de 29 países, incluyendo Estados Unidos de América, Chile y la mayor parte de Europa, todos con «sistemas de registro de defunciones de alta calidad», y descubrieron que 27 de ellos experimentaron reducciones en la esperanza de vida el año pasado «a una escala que aniquiló años de progreso» con respecto a la mortalidad.

Según explicó Aburto, «22 países incluidos en nuestro estudio experimentaron pérdidas mayores a medio año en el 2020» y detalló que «las mujeres en ocho países y los hombres en 11 países experimentaron pérdidas mayores a un año. Para contextualizar, estos países tardaron en promedio 5,6 años en lograr un aumento de un año en la esperanza de vida recientemente: el progreso desapareció en el transcurso del 2020 por el COVID-19», aseguró.

En la mayoría de los 29 países, los hombres experimentaron una mayor disminución de la esperanza de vida que las mujeres, la más alta, de 2,2 años en los hombres estadounidenses.

El doctor Ridhi Kashyap, coautor de la investigación, destacó que aunque «sabemos que hay varios problemas relacionados con el recuento de muertes» debido a la pandemia, «como pruebas inadecuadas o clasificación errónea, el hecho de que nuestros resultados resalten un impacto tan grande directamente atribuible al COVID-19,  demuestra cuán devastador ha sido el impacto para muchos países». Se estima que más de 1.8 millones de vidas se perdieron por causa del brote de coronavirus en todo el mundo en el 2020.

El estudio destaca que «antes de la pandemia, la esperanza de vida al nacer» aumentó de manera estable «en la mayoría de los países durante el siglo XX y hasta el XXI» y «en las últimas décadas, las mejoras en la esperanza de vida entre los países de ingresos altos se debieron principalmente a los avances logrados en las edades más avanzadas», es decir, en los mayores de 65 años.

Y «aunque el COVID-19 podría verse como un impacto transitorio en la esperanza de vida, la evidencia de morbilidad potencial a largo plazo debido al COVID-19 prolongado y al impacto en la atención tardía de otras enfermedades» así como «el aumento de las desigualdades derivadas de la perturbación social y económica» del brote «sugieren que las cicatrices de la pandemia en la salud de la población pueden ser más duraderas», concluye el informe.

El estudio fue realizado por el Centro Leverhulme de Ciencias Demográficas de Oxford y descubrió que los hombres de diez países y las mujeres de 15, tenían una esperanza de vida al nacer más baja en el 2020 que en el 2015,

Fuente: G.I.