Los primeros dos lotes de suero Anti-SARS-CoV-2 ya están listos y serían entregados a la CCSS en agosto del 2020, luego de pasar por estrictos controles de calidad.
El medicamento está siendo sometido a rigurosas pruebas de supervisión de calidad por parte del Laboratorio de Análisis y Asesoría Farmacéutica (LAYAFA), del Instituto de Investigaciones Farmacéuticas (INIFAR), ambos de la Universidad de Costa Rica (UCR), donde se garantizará la esterilidad de los viales que contienen las inmunoglobulinas equinas para asegurarse de que no contengan ningún tipo de contaminación con bacterias aerobias, hongos y levaduras.
El suero Anti-SARS-CoV-2, fabricado por el ICP, será entregado a la CCSS para ser inyectado a pacientes con COVID-19 que comiencen a presentar cuadros severos de la enfermedad para evitar que se compliquen por el avance de la neumonía.
El producto contiene altas concentraciones de inmunoglobulinas o anticuerpos contra el nuevo coronavirus, los cuales fueron generados en la sangre de caballos que fueron inmunizados cuatro veces con combinaciones diferentes de proteínas del SARS-CoV-2 durante un período de tres meses.
Las concentraciones de estos anticuerpos en el suero Anti-SARS-CoV-2 son mucho mayores y más potentes que la que posee el plasma de pacientes que ya superaron la enfermedad COVID-19.
Además, por cada persona donante se puede obtener un tratamiento para dos pacientes como máximo, mientras que de un caballo se puede obtener el tratamiento para 500 o más pacientes.
Una vez que la CCSS reciba los 1000 viales de suero y comience a aplicarlos a los pacientes diagnosticados con COVID-19, se comprobará a nivel clínico, la eficacia del medicamento para tratar la enfermedad.
Mientras tanto, la Universidad de George Mason en los Estados Unidos de América está analizando muestras del suero fabricado en Costa Rica para comprobar si logra inhibir el poder infeccioso del coronavirus SARS-CoV-2 en células cultivadas en laboratorio.
La fabricación en Costa Rica del suero Anti-SARS-CoV-2, es el resultado de un esfuerzo país, ya que además de las entidades mencionadas, en este esfuerzo participaron el Laboratorio Clínico y Banco de Sangre (LCBS), ambos de la UCR, así como el Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (INCIENSA), del Ministerio de Salud, mientras que el proyecto en general es coordinado por la CCSS.
Al respecto, el coordinador científico del proyecto, el Dr. Guillermo León Montero, explicó que “esto es un esfuerzo de equipo que ha sido realizado por todo el personal del Instituto Clodomiro Picado incluyendo personal del bioterio, del serpentario, de la caballeriza, la sección de producción, control de calidad, desarrollo tecnológico y el área administrativa.
“El esfuerzo ha sido grande y ha obtenido los frutos que teníamos programados. Las formulaciones cumplen con el diseño que habíamos previsto y tienen una alta concentración de anticuerpos contra las proteínas virales”.
El Dr. León sostuvo que el suero posee “una concentración bastante más alta que la que tienen los plasmas convalecientes. Pero solamente el estudio clínico dirá si la formulación es eficaz para el tratamiento del COVID.”
Actualmente ya está científicamente demostrado que estos anticuerpos o inmunoglobulinas obtenidas del plasma convaleciente de pacientes recuperados funcionan para contrarrestar infecciones causadas por virus respiratorios. (VER ESTUDIO)
Con ese logro del ICP, queda por demostrar que esto funciona de igual forma con las inmunoglobulinas equinas, lo cuál será un aporte más de este Instituto de la UCR y del país, a la ciencia mundial.
El proyecto desarrollado por el ICP fue declarado oficialmente de interés público y nacional mediante el decreto Nº42369-S, además recibió donaciones millonarias de parte del Consejo Nacional para Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICIT) y de la embajada de la Republica Popular China en nuestro país.
Varios de los caballos inmunizados fueron donados por particulares, entre ellos Flory Cruz y Rodolfo Cruz. Durante la inmunización, los animales recibieron todos los cuidados y atenciones por parte de veterinarios del ICP.
Para fabricar el suero Anti-SARS-CoV-2, el Instituto se basó en su amplia experiencia de más de cinco décadas en la producción de sueros antiofídicos que contienen anticuerpos, también llamados inmunoglobulinas, contra el veneno de serpientes.
El plasma sanguíneo, del cual se extraen estos anticuerpos, no se obtiene de personas a quienes haya mordido una serpiente, sino de caballos a los que se les inyecta una pequeña dosis del agente contra el cual se requiere que genere anticuerpos.
De igual forma, el plasma con anticuerpos contra el nuevo coronavirus se obtuvo de los caballos utilizando la misma tecnología para producir antivenenos.
Con este gran logro científico que representa producir en Costa Rica y con talento nacional el suero Anti-SARS-CoV-2, la UCR brinda al país y al mundo una terapia para enfrentar la neumonía COVID-19 causada por el nuevo coronavirus y así disminuir su mortalidad y la morbilidad.
La investigación y elaboración del suero Anti-SARS-CoV-2 ha estado bajo la coordinación del Dr. Guillermo León Montero.
Este científico obtuvo la Licenciatura en Microbiología en la UCR en el año 1994, posteriormente cursó la Maestría en Inmunología en 1999 y el Doctorado en Microbiología y Química Clínica en el 2008, ambos en esta misma Universidad costarricense.
El Dr. León fue galardonado en el año 2009 con el “Premio Nacional Clodomiro Picado Twight”, que otorga el Estado a científicos (as) costarricenses por sus contribuciones en las áreas de ciencia y tecnología.
Actualizado por Manrique Vindas Segura el miércoles 22 de julio del 2020.
Todo el equipo científico y administrativo del ICP trabajó a paso redoblado desde que se inició la pandemia para producir el suero Anti-SARS-CoV-2 en el menor tiempo posible.