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¿Cómo se moviliza la población a la UCR?

Andrea Marín Castro
27. 10. 14

Recientemente el tema de movilidad y transporte en la Sede Rodrigo Facio Brenes de la Universidad de Costa Rica (UCR) en San Pedro de Montes de Oca, ha tomado gran importancia, por lo que diversas instancias investigan y desarrollan estrategias acordes con la realidad de la comunidad universitaria.

El autobús es el medio de transporte más utilizado para trasladarse a la Sede Rodrigo Facio en San Pedro de Montes de Oca.

En la actualidad no se cuenta con información detallada sobre la cantidad de personas que se desplazan diariamente al campus universitario y el impacto que esto representa en el transporte en el cantón de Montes de Oca.

Información importante al respecto la reveló la Encuesta de Transporte 2013 efectuada por el Programa de Infraestructura del Transporte (Pitra) del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme), que arrojó datos interesantes.

Específicamente, el 63 % de los viajes se efectúa en autobús, el 3 % en tren, el 17 % de los traslados en vehículos particulares, el 3 % viaja en taxi, el 12 % se moviliza a pie y solamente un 1 % lo hace en bicicleta.

Esto significa que dos terceras partes de los viajes a la Sede Rodrigo Facio de la Universidad de Costa Rica (UCR) se realizan en transporte público colectivo.

Los ingenieros Henry Hernández Vega y Diana Jiménez Romero, quienes estuvieron a cargo del estudio, explicaron que el propósito de la encuesta fue caracterizar los viajes que se realizan a la Sede Rodrigo Facio de la UCR, para lograr un mejor entendimiento de los patrones de movilidad y de las necesidades de las personas que utilizan las instalaciones de esta institución.

“La idea es generar un diagnóstico y obtener información base que eventualmente podría servir a tomadores de decisiones. Además, en el futuro se podrán evaluar las diferentes políticas, determinar cuán exitosas han sido con el tiempo o ver los cambios en el comportamiento de las personas”, señaló Hernández.

Asimismo, los resultados obtenidos servirán de base para la elaboración de proyectos, recomendaciones y estrategias orientadas a mejorar la calidad del servicio.

Para obtener los datos se realizó una encuesta electrónica. La Oficina de Registro e Información (ORI) fue la instancia encargada de enviarla a los estudiantes, mientras que la Oficina de Divulgación e Información (ODI) colaboró para hacerla llegar a docentes y administrativos.

Factor distancia

Otro dato importante que se obtuvo en el estudio es que el 95 % de los encuestados se concentra en 29 cantones del país. Montes de Oca, San José, Goicoechea y Desamparados son los lugares donde habita más de una tercera parte de la población estudiada.

El 28 % vive a una distancia de entre dos y cinco kilómetros de la Sede Rodrigo Facio y alrededor de un 50 % vive a una distancia menor a 10 kilómetros. Aproximadamente el 30 % recorre 20 kilómetros o más de su casa a la UCR.

De acuerdo con los investigadores, la distancia entre el lugar de residencia y la UCR tiene una incidencia en la escogencia del modo de transporte.

“Las personas que caminan o viajan en bicicleta lo hacen porque viven cerca de la institución. Por el contrario, los usuarios de transporte público mencionaron que viajan de esta manera porque habitan lejos del campus”, precisó Jiménez.

La falta de vehículo y el no tener licencia de conducir son las principales razones por las cuales las personas entrevistadas utilizan el transporte público. También los usuarios de autobús y quienes caminan prefieren estos medios debido a razones económicas.

“El ingreso familiar tiene un efecto directo en el medio de transporte utilizado; por ejemplo, conforme aumenta el ingreso de la población también aumenta la proporción de viajes que realiza en transporte privado y disminuye la cantidad de viajes que se realizan caminando o en transporte público”, subrayó Hernández.

El 42 % de las personas encuestadas indicó que el ingreso familiar mensual es menor a ¢500 000. Este grupo poblacional representa el 13 % de los viajes reportados en automóvil. La mayoría de los viajes en este grupo se realiza en transporte público. 

Por otro lado, el 5 % de las personas indicó que su ingreso familiar es mayor a ¢2 millones, grupo que representa el 27 % de los viajes en automóvil a la Universidad.

Quienes utilizan vehículo particular lo hacen mayoritariamente por rapidez y seguridad. Mientras tanto, la falta de rutas de autobús cercanas afecta a las personas que viajan en tren o como pasajeros en vehículos particulares.

El grupo de los ciclistas fue la única población que escogió la salud y la protección del ambiente como razones fundamentales para utilizar este medio de transporte.

La Encuesta de Transporte 2013 forma parte del apoyo que está brindando el Lanamme a la Comisión de Movilidad Activa, con el objetivo de generar información y datos que sirvan de insumo para la toma de decisiones y la puesta en práctica de políticas que mejoren el transporte en la Sede Rodrigo Facio.

Se tiene planeado realizar este tipo de estudios de forma periódica y así generar tendencias en cuanto a patrones y características de movilidad de la comunidad universitaria.


METODOLOGÍA

La encuesta se dividió en tres grupos de preguntas: información demográfica, preguntas sobre movilidad y preguntas sobre movilidad en bicicleta. En total, 5306 personas ingresaron al portal de la encuesta electrónica y 3446 completaron todos los grupos de respuestas. Se incluyeron las respuestas de los 1860 usuarios que respondieron el instrumento de forma parcial. El 94 % de las personas encuestadas corresponde a estudiantes de la UCR y un 13 % a personal docente y administrativo. Además, existe un porcentaje del estudiantado que también labora para la Universidad. El 53 % de las respuestas proceden de mujeres y un 47 % de hombres. Tres cuartas partes de los encuestados tienen edades entre 16 y 25 años, 17 % entre 25 y 35 años y un 8 % tiene más de 35 años. Parte de la población universitaria quedó excluida, pues no forma parte de las bases de datos mediante las que se invitó a contestar el cuestionario. De igual manera, la participación fue voluntaria y no todos los usuarios del campus tienen acceso a correo electrónico o Internet de forma periódica.