Un estudio demuestra que el consumo moderado diario de frutas y verduras se asocia con menores tasas de estrés psicológico.
El estudio descubrió que las personas que comían 3-4 raciones diarias de verduras tenían un 12% menos riesgo de estrés que los que solo comían una, mientras que el consumo de entre 5 y 7 raciones reducía el riesgo un 14% en comparación con quienes comían hasta 4 al día.
Un trabajo de la Universidad de Sidney (Australia) ha revelado que cuanto mayor es el consumo diario de frutas y verduras más probabilidades de mantener a ralla los niveles de estrés, sobre todo entre las mujeres, según los resultados de una investigación publicada en el British Medical Journal Open.
Su trabajo se basó en un estudio longitudinal con más de 60.000 ciudadanos de más de 45 años en los que evaluaron el consumo de frutas y verduras, sus hábitos de vida y su angustia psicológica en dos momentos, entre los años 2006 y 2008 y en 2010.
La angustia psicológica se midió utilizando la escala de distensión psicológica de Kessler, un cuestionario de 10 ítems que mide la ansiedad general y la depresión. De este modo, vieron que las personas que comían 3-4 raciones diarias de verduras tenían un 12 por ciento menos riesgo de estrés que los que solo comían una, mientras que el consumo de entre 5 y 7 raciones diarias de fruta y verdura reducía el riesgo un 14 por ciento en comparación con quienes comían hasta cuatro al día.
Asimismo, en el caso concreto de las mujeres vieron que quienes comían 3-4 porciones diarias de verduras tenían un 18 por ciento menos riesgo de estrés que las mujeres que comían una al día, y si comían dos raciones de fruta por día su riesgo de estrés bajaba un 16 por ciento en comparación con quienes sólo comen una o ninguna. Y si comían hasta 5-7 comidas diarias con frutas y verduras tenían un 23 por ciento menos riesgo de estrés que las mujeres que, como mucho, sólo comían una.
Al inicio del estudio las características asociadas con un mayor estrés era ser mujer, ser más joven, tener un menor nivel educativo o de ingresos, tener sobrepeso u obesidad, ser fumador o presentar inactividad física.
El consumo de frutas por sí solo no tuvo una asociación significativa con una menor incidencia de estrés, y tampoco hubo una asociación significativa entre los niveles más altos de ingesta de frutas y verduras (más de 7 porciones diarias) y una menor incidencia de estrés. "Este estudio muestra que el consumo moderado diario de frutas y verduras se asocia con menores tasas de estrés psicológico", según Melody Ding, investigadora de la Escuela de Salud Pública de Sydney que ha participado en este trabajo. Asimismo, también revela que la ingesta moderada y diaria de verduras por sí mismo no consigue por si sola una menor incidencia del estrés psicológico.
Los hallazgos son consistentes con numerosos estudios transversales y longitudinales que muestran que las frutas y verduras, juntas y por separado, están relacionadas con un menor riesgo de depresión y mayores niveles de bienestar, según diferentes parámetros utilizados para medir la salud mental. No obstante, admiten que todavía hay que definir cuál es el "umbral" entre un nivel medio-alto de la ingesta de frutas y verduras y el riesgo de estrés.
El consumo moderado diario de frutas y verduras se asocia con menores tasas de estrés psicológico, según Melody Ding, investigadora de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Sidney en Australia. (Foto G.I.)