Las personas con duelos complicados tras la muerte de un ser querido por COVID-19 son más propensas a padecer ansiedad, estrés y un agravamiento de trastornos mentales preexistentes.
Además tienen mayores probabilidades de tener ideas suicidas, sobre todo en contextos de ingresos bajos y con problemas de atención médica.
Esas son las conclusiones de un estudio publicado en la revista Omega, "journal of death and dying", y de dos...