Una bebida de mora orgánica que, a diferencia de las que encontramos hoy en día en el mercado, mantiene todas sus propiedades, podría llegar pronto al mercado nacional como parte del trabajo de investigadores del Centro Nacional de Ciencia y Tecnología (CITA).
A diferencia de otros productos, este jugo conserva todas las propiedades de la mora lo que lo hace especialmente beneficioso para la salud
Una bebida de mora orgánica que, a diferencia de las que encontramos hoy en día en el mercado, mantiene todas sus propiedades, podría llegar pronto al mercado nacional como parte del trabajo de investigadores del Centro Nacional de Ciencia y Tecnología (CITA).
El objetivo del producto es entrar en un mercado en el que las personas están buscando opciones saludables y naturales que les permitan llevar un mejor estilo de vida. El resultado de estas investigaciones será comercializado por la empresa spin-off, bajo el nombre de “Siwa”.
“Nuestra invención fue motivada por la tendencia de las personas de consumir productos funcionales con el fin de mantener una buena salud o prevenir problemas salud”, explicó la Dra. Ana Mercedes Pérez Carvajal, una de las investigadoras del CITA.
Lo que diferencia a esta opción de las que ofrece el mercado, es el proceso denominado “microfiltración tangencial”, por medio del cual obtiene la pulpa, y que a diferencia de otras técnicas, no utiliza el calor y esto permite que la fruta conserve sus propiedades.
Los investigadores buscaron esta alternativa que pudiera dar un valor agregado a una fruta muy conocida en el mercado nacional, pero que por sus características propias es difícil de transportar a otros mercados sin alterar sus propiedades originales.
La mora es una fruta reconocida por sus propiedades antioxidantes que tiene la ventaja de estar muy disponible en el país y es de fácil cultivo. Es por esto que los investigadores decidieron trabajar con esta fruta en lugar de otras.
Entre los beneficios del consumo de mora están su capacidad para disminuir el colesterol y los triglicéridos; el aporte de antioxidantes como antocianinas, flavonoides y ácidos fenólicos; y su capacidad para proteger de los rayos ultravioleta.
Otros estudios realizados a esta fruta demostraron que tiene beneficios mayores en comparación con otras como la ciruela, la fresa, el arándano azul, el tomate, la sandía y el melón; conocidos por sus propiedades, pero más escasos en nuestro país. El grupo de investigadores determinó que incluso tenía un mayor contenido de antioxidantes que estas otras variedades.
Los responsables de elaborar este jugo orgánico encontraron varios inconvenientes a la hora de industrializar y exportar la mora. El problema principal tiene que ver con que trata de un producto muy perecedero y que, a pesar de que algunas variedades sí pueden ser exportadas, no todas califican para este objetivo, por lo que se procede a congelarlas y comercializarlas en el mercado local.
“Bajo este contexto, investigamos cómo obtener un producto en el cual no se aplica ningún proceso térmico para así obtener un concentrado de mora que contenga los compuestos funcionales”, explicó la Dra. Pérez.
Con este jugo, los productores y asociaciones nacionales dedicadas al cultivo de la mora podrían abrir la puerta que hasta el momento se les mantenía cerrada para exportar a mercados atractivos y de gran beneficio económico como el estadounidense y europeo.
De esta manera, la bebida orgánica de fruta no sólo beneficiará a los consumidores, sino a los mismos productores que a través del uso de esta tecnología podrán incursionar a nuevos mercados. La bebida tiene la ventaja de que conserva las propiedades, pero al tratarse de una bebida también le da un valor agregado y diferencia el producto.
Este proyecto ha sido desarrollado en conjunto por investigadores del Centro Nacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos (CITA) de la Universidad de Costa Rica (UCR), y del Centre de Coopération Internationale en Recherche Agronomique pour le Développement (CIRAD) de Francia.
Para esta iniciativa, los responsables decidieron utilizar el método de microfiltración tangencial. Esta técnica permite procesar la materia prima, en este caso la mora, a través del uso de membranas artificiales que tienen el objetivo de retener partículas microscópicas como bacterias.
Lo anterior garantiza que, sin tener que pasar por más procesos como la pasteurización, el jugo obtenido va a ser inocuo y libre de microorganismos que puedan tener efectos negativos.
Otra ventaja de este proceso, es que no requiere la adición o uso de solventes químicos por lo que el producto final no tiene residuos de este tipo que puedan resultar nocivos para la salud de los eventuales consumidores.
La membrana utilizada en la microfiltración es la que le da la resistencia a la fruta a la hora de convertirse en jugo y diferencia a este producto de otros que se encuentran en el mercado nacional e internacional.
El impacto positivo del consumo de la bebida orgánica de mora no sólo se asume. Los investigadores del CITA realizaron un estudio en conjunto con el Instituto de Investigaciones Farmacéuticas (INIFAR) para evaluar los efectos en la salud de ingerir el jugo elaborado a partir del microfiltrado.
De esta manera, se sometió a 15 personas sanas a una dieta rica en grasa y carbohidratos al tiempo que consumían el jugo de mora y se les observó durante una semana.
Los resultados mostraron que el consumo de este producto tiene un efecto protector en las células y combate los efectos negativos de una dieta alta en grasas y carbohidratos gracias a la acción de las propiedades antioxidantes.
La bebida orgánica de mora puede tener efectos positivos en personas que sufren de dislipemia y diabetes, pues aporta gran cantidad de antioxidantes y es bajo en azúcar.
Los investigadores han trabajado también en la formulación de bebidas de otras frutas como la piña, que de igual manera, permitan mantener las propiedades y el sabor natural de las materias primas.
La Dra. Ana Mercedes Pérez Carvajal, Dr. Óscar Gerardo Acosta Montoya, y el M.Sc. Marvin Soto Retana del CITA y el Dr. Fabrice Vaillant Barka del CIRAD recibieron un reconocimiento en el X Aniversario de PROINNOVA, celebrado a finales del año anterior, como una de las innovaciones elaboradas desde la UCR y que han ayudado a aportar soluciones a la sociedad.