Ciencia en el mundo

Acción bactericida permanecería en paredes de hospitales entre 8 a 10 años

Crean pintura contra las bacterias intrahospitalarias

SciDev
26. 06. 17

Una pintura de alto poder bactericida, toxicidad casi nula para las personas y bajo impacto ambiental podría utilizarse para combatir enfermedades intrahospitalarias, convirtiéndose en una aliada de la salud pública.

 

Mediante placas de contacto se busca conocer si las pinturas aplicadas actúan como freno a la proliferación de bacterias (Foto SciDev/INTI)

Aunque aún no se comercializa, la pintura está siendo ensayada con éxito en la sala de guardia, algunos pasillos y en el laboratorio de microbiología del “Hospital Dr. Antonio Cetrángolo” de la provincia de Buenos Aires, centro especializado en enfermedades de las vías respiratorias.

En la actualidad existen en el mercado pinturas bactericidas, pero de costo inaccesible para la salud pública. Ello, porque para lograr su mantenimiento a lo largo del tiempo se les añade alta concentración de compuestos antimicrobianos, lo que además genera un riesgo potencial para la salud y el ambiente, y vuelve resistente a las bacterias.

La pintura desarrollada por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) de Argentina emplea, en cambio, nanopartículas de plata y de cobre con propiedades bactericidas. La ventaja es que este compuesto podría agregarse, incluso, a una pintura común para volverla bactericida.

“Esta metodología nos permite reducir la concentración del agente antimicrobiano ─lo que impacta en el costo─ y bajar su toxicidad”, detalló la licenciada en química Mónica Pinto, responsable de la Unidad Técnica de Pinturas y Recubrimientos del Centro INTI Procesos Superficiales.

En las paredes del Hospital Cetrángolo se aplicaron tres tipos de pinturas: una común, sin bactericida; otra con acción bactericida, en nanopartículas de plata, y otra con el mismo principio, pero en partículas de cobre.  

Si bien los tecnólogos ya habían comprobado en laboratorio un efecto bactericida superior al 99,9% para el producto en base a plata, ahora buscan demostrar en el terreno la eficacia de esa formulación y de la que emplea cobre, para bajar aún más los costos.

Para ello, cada tres meses a lo largo de un año, tomarán muestras de las tres pinturas y compararán el número de colonias de bacterias presentes en cada caso.

“En el primer control, realizado hace tres meses, comprobamos que los resultados obtenidos con las partículas de plata y cobre fueron similares. La acción bactericida de la pintura debería permanecer entre 8 y 10 años”, dice Pinto a SciDev.Net.

Los estudios microbiológicos de las muestras son efectuados por la Unidad Técnica de Nanomateriales del Centro INTI Procesos Superficiales.

“La infecciones intrahospitalarias son un problema grave de salud. Esperamos poder pintar todas las salas, con el beneficio adicional del bajo costo. Al finalizar los controles, si la pintura funciona cómo esperamos, evaluaremos cuánto incide su uso en el descenso total de casos”, dice a SciDev.Net Nora Morcillo, microbióloga a cargo del Servicio de Laboratorio del Hospital Cetrángolo.

La pintura bactericida del INTI está protegida con cinco patentes. Ahora aspiran transferirla al sector privado, ya que desde hace 60 años, la misión de ese Instituto es lograr desarrollos innovadores cuya transferencia fortalezca a la industria local.

La pintura desarrollada por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) de Argentina emplea nanopartículas de plata y de cobre con propiedades bactericidas. (Foto G.I.)