En pruebas de laboratorio, investigadores chilenos lograron eliminar 100 por ciento del arsénico de aguas con una alta concentración de este compuesto altamente tóxico, utilizando bacterias que lo remueven y decantan, generando además un producto de valor comercial.
Investigadores chilenos realizan pruebas del agua en el campo. (Foto: Víctor Campos, SciDev)
En la investigación, financiada con fondos estatales, expertos del Departamento de Microbiología de la Universidad de Concepción aislaron bacterias de la cepa Pseudomonas sp. en el río Loa, un curso de agua del norte de Chile que presenta una concentración de entre 800 a 1.200 μg/L (microgramos por litro) de arsénico. Es decir, alrededor de cien veces los 10 μg/L recomendados por la OMS para el consumo humano.
Las Pseudomonas sp., son una especie de bacteria calcificante, que resiste el arsénico y lo transforma a través de un proceso de oxidación. Los investigadores aprovecharon estas propiedades para crear un estanque o biorreactor donde las Pseudomonas sp. quedan inmovilizadas en un soporte inerte.
Al entrar el agua contaminada, las bacterias transforman el arsenito As(III) en arseniato o As(V). Al mismo tiempo, las bacterias hidrolizan urea, lo que cambia el pH en el reactor, haciendo que el carbonato de calcio —un compuesto naturalmente presente en el agua— se transforme en calcita. Este biomineral luego absorbe el arseniato del agua y precipita como cristales de calcita, describe Víctor Campos, autor principal del estudio, de próxima publicación.
Como resultado, el agua sale limpia y los cristales de calcita pueden comercializarse como pesticida, abono agrícola o materia prima para otras industrias.
El equipo investigador, integrado además por la doctora en microbiología Carla León, el doctorando Cristián Valenzuela y la profesora emérita María Angélica Mondaca, ahora postulan a un financiamiento estatal equivalente a US$247.000 para finalizar la construcción del reactor a escala piloto y evaluar los parámetros operacionales.
El reactor funcionaría como un sistema de decantación que no requiere grandes bombas para impulsar el agua, dice Campos.
El experto añade que apuntan a utilizarlo en ríos contaminados que surten de agua a comunidades indígenas del norte de Chile, “pero debiese funcionar bien en cualquier tipo de afluente natural con arsénico”.
Investigadores del Departamento de Microbiología de la Universidad de Concepción en Chile lograron, en laboratorio, eliminar 100 por ciento del arsénico de aguas con una alta concentración de este compuesto tóxico. (Foto G.I.)