Podemos empezar por cualquier parte, por hoy, ayer o anteayer; o explicando la diferencia entre esos tres tiempos. Cada edad tiene secretos diferentes que son el mismo secreto en otro tono musical. El niño es ahistórico, el adolescente usa su espacio solo para pensar en el futuro y el viejo, como es bien sabido, vive mayormente en el pasado. Pero en el fondo, los tres estadios tienen una unidad sobrecogedora y apabullante.
Autor: Claudio Gutiérrez Carranza