En Costa Rica, la venta de drogas a pequeña escala es el principal delito por el que las mujeres ingresan a la cárcel. Aunque solo un 3,49 por ciento del total de la población penitenciaria del país corresponde a mujeres, al menos el 40 por ciento de ellas ingresa por una falta a la Ley N.º 8204 sobre estupefacientes. Fenómeno relacionado tanto con las políticas internacionales de penalización, como a los contextos socioeconómicos,
políticos y culturales en el ámbito local.
Esta dinámica ilegal se ha convertido en una economía de sobrevivencia y forma parte de otras actividades, muchas del mismo calibre informal, de las que
algunas personas se apropian para salir adelante en su vida cotidiana.
El trabajo de campo que da sustento a este texto evidencia que la relación de un reducido grupo de mujeres al comercio de pequeñas cantidades de drogas se enmarca en una estrategia para resolver la inmediatez.
Estas historias, aunque recogen tácticas para intentar superar situaciones iniciales de desigualdad, han tenido un contexto sociocultural específico, el cual ha decantado en otras dinámicas de exclusión económica e invisibilidad social.